Resumen
En un mundo cada vez más complejo no es posible tratar aisladamente lo económico y lo político, tampoco lo sociológico, lo psicológico y lo afectivo. Este hecho lleva a plantear que la tarea educativa demanda una resignificación de su misión. Para que esto sea auténtico, es responsabilidad de todos los actores educativos y se debe caracterizar por la concepción de ser humano, sociedad y educación que se tenga. En este artículo se resaltan cuatro pedagogías que emanan de la tradición lasallista y se propone el uso de algunas estrategias didácticas, a fin de desarrollar de manera privilegiada el pensamiento crítico y complejo, la toma de conciencia por lo social, lo ético y lo justo, y la posibilidad de vincular conocimientos que generen cambios creativos que contribuyan a la transformación de la sociedad.
Downloads
Download data is not yet available.